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Solo ha hecho falta una semana para que los vecinos de Sant Andreu de Palomar se pusieran de acuerdo y se movilizaran contra cesión temporal y gratuita de terrenos públicos a la Hermandad de los Antiguos Caballeros Legionarios de Barcelona.

El Consorci de la Zona Franca, institución presidida por el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, ha decidido entregar una superficie de 5.000 metros cuadrados de les Casernes de Sant Andreu a los legionarios. Un espacio en el que desde hace más de 7 años debería estar ocupado por toda una serie de equipamientos públicos, en lugar de ser el punto neurálgico de actos militares.

De esta forma, el local de la Hermandad legionaria, más allá acoger algunos nostálgicos franquistas (en su página web se honra una fotografía del dictador), también será el espacio donde recrear desfiles armados, y procesiones con figuras religiosas.

Por este motivo, este miércoles pasado se concentraron ante el Ayuntamiento del distrito más de 200 personas tras del lema “Fora feixistes, ni a Sant Andreu ni enlloc”. Coyuntura que los vecinos aprovecharon para entrar en el pleno extraordinario que se estaba celebrando y leer un manifiesto ante todos los consejeros. Una vez terminada la exposición recorrieron las calles del “poble” en manifestación.kkkk

La nueva plataforma Sant Andreu Antifeixista clama por “expulsar a los fascistas” y “recuperar los cuarteles para los vecinos”. Una expulsión que viene motivada además por los accidentes ocurridos el 12 de octubre, cuando “un grupo de falangistas cometió una serie de agresiones cerca del local”, para luego “refugiarse” en el mismo. Un hecho que fue “silenciado”, y que todavía a día de hoy resta “impune”.

Después de todo, el Presidente de la Hermandad de los Antiguos Legionarios de Barcelona, Jesús Cañadas, se ha defendido ante los medios declarando que no son “fachas”, sino “militaristas”. Unos verdaderos apasionados de la Legión Española.

Fotografías y texto de David Garcia