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Barcelona, 5 de octubre de 2014- “A un año de la muerte de Juan Andrés Benitez, los vecinos del barrio del Raval recuperan un espacio público para el barrio.»
Los días 5 de los últimos 12 meses en calle Aurora no faltaron nunca las velas para recordar la trágica muerte de Juan Andrés Benítez en manos de la policía. Imagen que dió la vuelta al mundo gracias a la valentía de los vecinos que captaron esas imágenes para que un año después y luego de un controvertido juicio llevado a cabo contra los Mossos de Esquadra de la Comisaría de Ciutat Vella, se pudiera conocer días atrás el pedido de la Fiscalía de 11 años y 6 meses para 6 de los policías implicados en la brutal paliza que le causara la muerte al empresario.
La calle Aurora contaba ya con un mural realizado en diciembre del año pasado, en homenaje a Juan Andrés donde algunos graffiteros pudieron darle voz con imágenes, a esa triste muerte del que fuera testigo silencioso en su momento.
Pero más secretos se guardaban detrás esa pared y los vecinos del barrio del Raval lo sabían. Desde hacía años un solar plagado de ratas y mugre, en manos del SAREB el Banco malo (como si los hubiera buenos) privaba de tener un espacio público a los niños y grandes que viven en el barrio.
Una de las imágenes más habituales del Raval es ver jugar a los niños a la pelota entre los coches por las angostas calles. Los bancos de los parques suelen ser individuales, intencionalmente montados sobre la "incomunicación". Y el verde no abunda entre tanto cemento.
Este solar abandonado es ahora el Ágora Juan Andrés Benítez, y fue recuperado con el trabajo, esfuerzo y solidaridad de la gente del barrio y de diversos colectivos que trabajaron duro para limpiarlo en apenas 2 días, arrancando maleza, picando piedras, blanqueando sus paredes para volver a plasmar imágenes de vida sobre la muerte, para que en ese espacio por fin, los chicos puedan jugar, y los vecinos puedan utilizarlo como decidan en sus asambleas que se realizan cada lunes.
Durante los dos días de limpieza no faltó gente que acercó plantas, pinturas, escaleras, tiendas, maderas para construir un pequeño escenario que sirvió para que el grupo de Teatro de Indignados del Raval, con sus personajes caricaturescos de Mercé FONGS, regidora de Ciutat Vella y Xavier FRÍAS, el entusiasta Alcalde de la autogestión, junto con sus gossos guardianes, inauguraran el espacio con todo el humor al que nos tienen acostumbrados.
El trabajo de los alumnos de la Escola Massana sobre los murales ofreció el marco perfecto para que el soleado domingo, contara con una larga mesa al viejo estilo de la Barcelona que escapa a la MARCA Fashion, donde se degustó una riquísima «fideuá» hecha con todo amor por las cocineras del Raval
Luego de la asamblea donde se volcaron propuestas para el funcionamiento del nuevo espacio recuperado, a las 18.30 h. estaba convocada la manifestación desde la Sede del Distrito.
Por las calles se pudieron ver los rostros de Juan Andrés en máscaras de papel, de quienes caminando por las calles, clamaron Justicia para la víctima y el fin de la violencia policial, en el barrio y en todas partes. A la marcha se sumaron otras víctimas de la violencia policial como Ester Quintana, Carles Guillot y Nicola Tanno, víctimas de balas de goma. Y otras víctimas de la persecución policial en el barrio como las «Putas Indignadas» que también se hicieron presentes. 
Se regresó a la calle Aurora para encender las tradicionales velas de cada mes con un minuto de silencio y una pared que se cubrió de caras de Juan Andrés que la gente fue pegando, mientras comenzaba a sonar «Prefiero amar» de El Muerdo, desde el solar, que llamaba a acabar con emoción la jornada.
Con un sentido discurso de la abogada de la causa Laia Serra y Gerardo Ariza, amigo de la víctima, fue acabando la ceremonia.
Se proyectó el vídeo realizado por actores del Teatre del Raval «El Raval está en venta» El colectivo La Llama formado por jóvenes del barrio, presentó su trabajo musical con imágenes de la represión policial, y finalmente un tema compuesto por el grupo Súper Spanish Combo «Mataron a Juan Andrés»al ritmo salsero, despertó un pequeño bailecito de cierre ya entrada la noche. Que como bien señalara al en su discurso Gerardo, gran luchador de esta causa, a su amigo «le hubiera encantado vernos bailar y emborracharnos en su honor». No fue así porque aún falta bastante camino por atravesar en la lucha por #JusticiaJuanAndrés, pero no se descarta que al final de esta lucha, ese deseo no se cumpla a pie juntillas.
De momento ya hay una futura plaza para los vecinos del Raval que esperemos llene de risas y alegría a un Raval cada vez más sesgado y perseguido por una campaña de limpieza étnica en post de un turismo MARCA Barcelona.
Qué prime la vida sobre la muerte, el amor sobre la violencia, y la solidaridad sobre toda mezquindad.
Texto: Victoria Columba
Fotos: Pedro Mata
Una imagen vale más que mil palabras, y ayer, se escribió un nuevo renglón de la Historia de Barcelona.
Ya dos días antes la comunidad lgtb, a la que pertenecía Juan Andrés Benítez, y tras un duro trabajo, consiguió sacar adelante la aprobación en el Parlament de una Ley contra la lgtbfobia: la primera del mundo que sanciona al agresor.
¡¡que feliz hubiese estado Juan Andrés de vivir este momento!!
…pero ayer también los ciudadanos, escribieron un nuevo renglón, dando un ejemplo de solidaridad, llave fundamental para la defensa de los Derechos Humanos; un mensaje de paz, encendiendo velas contra la violencia policial, su brutalidad y su impunidad, en el lugar donde los mossos dieran esos “golpes de relajación” a Juan Andrés Benítez Álvarez; un mensaje claro y contundente de resistencia a las bondades dialécticas de los políticos de la consejería de Interior de Convergencia y Unió: “praxis, cops al cap, suspensión de imputados, investigaciones internas tardías, CONTROL DE IMÁGENES, neteja de manchas de sangre, imputación por acción, no por no parar los hechos, política de implantación de miedo de Felip Puig como medida de control ciudadano…rigor, pulcritud y honestidad”
Ante este discurso tecnicista, los más pequeños que se acercaron a la calle Aurora ayer, lo tienen clarísimo cuando te cuentan qué pasó: mataron a Juan Andrés los mossos y son culpables.
Me enfocan objetivos de cámaras, y me siento responsable de transmitirles, que mi rostro es el de cualquier ciudadano que quiere que el modelo de ciudad donde vivamos sea más justo. Me siento alegre de causar empatías entre personas y entidades tan diferentes y diversas, trabajando por hacer justicia. Me siento contento por buscar siempre una “Koiné” que nos lleve a todos a buen puerto. Y me siento feliz. Sí. Porque a pesar del inmenso dolor que producen las imágenes que grabaron los vecinos, han servido para hacer justicia. Su saber estar atentos, y su valentía, han sido fundamentales en este caso. Tomar imágenes es hacer soñar, es disfrutar, pero también es transmitir, contar, dar testimonio, recordar. Y recordar es no olvidar, hecho fundamental en casos de injusticia.
Los vecinos del Raval, junto a la Asamblea del Raval, han logrado cambiar el paradigma, han desenfocado ese punto de vista estigmatizante que se tiene del raval y han demostrado este fin de semana, que aunque esa imagen que se quiere dar de las personas que se organizan dista mucho de una imagen de político burgués de derechas, es incuestionable su capacidad de gestionar un barrio, por el camino de la lucha no violenta, de la creencia firme de construir un barrio pacífico y justo donde desde el primero al último de sus vecinos sea escuchado. Como prueba latente de ello, el Ágora Juan Andrés Benítez da vida a la calle Aurora. Vida social, vida política, vida transversal, vida al recuerdo de un hecho gravísimo que no debe quedar en el olvido.
Ojalá pudiera volcar las imágenes que me llenaron de emoción ayer…
La manifestación, dio nuevamente un ejemplo de civismo. No había pancarta de cabecera, hecho que me pareció clave a la hora de hacer ver que del primero al último todos todos valemos un potosí. Las caras de Juan Andrés multiplicadas, dieron una muestra de objetivos claros:
Todos somos Juan Andrés Benitez. Fue él pero podría ser cualquiera mañana. Y no, no lo podemos permitir.
Confluencias y sinergias, son un claro ejemplo de lo que ha dejado Juan Andrés, en su paso por Barcelona, una y otra sirvan de ejemplo como muestra de que juntos lo conseguiremos.
Una imagen vale más que mil palabras, y ayer, se escribió un nuevo renglón de la Historia de Barcelona.
Ya dos días antes la comunidad lgtb, a la que pertenecía Juan Andrés Benítez, y tras un duro trabajo, consiguió sacar adelante la aprobación en el Parlament de una Ley contra la lgtbfobia: la primera del mundo que sanciona al agresor.
¡¡que feliz hubiese estado Juan Andrés de vivir este momento!!
…pero ayer también los ciudadanos, escribieron un nuevo renglón, dando un ejemplo de solidaridad, llave fundamental para la defensa de los Derechos Humanos; un mensaje de paz, encendiendo velas contra la violencia policial, su brutalidad y su impunidad, en el lugar donde los mossos dieran esos “golpes de relajación” a Juan Andrés Benítez Álvarez; un mensaje claro y contundente de resistencia a las bondades dialécticas de los políticos de la consejería de Interior de Convergencia y Unió: “praxis, cops al cap, suspensión de imputados, investigaciones internas tardías, CONTROL DE IMÁGENES, neteja de manchas de sangre, imputación por acción, no por no parar los hechos, política de implantación de miedo de Felip Puig como medida de control ciudadano…rigor, pulcritud y honestidad”
Ante este discurso tecnicista, los más pequeños que se acercaron a la calle Aurora ayer, lo tienen clarísimo cuando te cuentan qué pasó: mataron a Juan Andrés los mossos y son culpables.
Me enfocan objetivos de cámaras, y me siento responsable de transmitirles, que mi rostro es el de cualquier ciudadano que quiere que el modelo de ciudad donde vivamos sea más justo. Me siento alegre de causar empatías entre personas y entidades tan diferentes y diversas, trabajando por hacer justicia. Me siento contento por buscar siempre una “Koiné” que nos lleve a todos a buen puerto. Y me siento feliz. Sí. Porque a pesar del inmenso dolor que producen las imágenes que grabaron los vecinos, han servido para hacer justicia. Su saber estar atentos, y su valentía, han sido fundamentales en este caso. Tomar imágenes es hacer soñar, es disfrutar, pero también es transmitir, contar, dar testimonio, recordar. Y recordar es no olvidar, hecho fundamental en casos de injusticia.
Los vecinos del Raval, junto a la Asamblea del Raval, han logrado cambiar el paradigma, han desenfocado ese punto de vista estigmatizante que se tiene del raval y han demostrado este fin de semana, que aunque esa imagen que se quiere dar de las personas que se organizan dista mucho de una imagen de político burgués de derechas, es incuestionable su capacidad de gestionar un barrio, por el camino de la lucha no violenta, de la creencia firme de construir un barrio pacífico y justo donde desde el primero al último de sus vecinos sea escuchado. Como prueba latente de ello, el Ágora Juan Andrés Benítez da vida a la calle Aurora. Vida social, vida política, vida transversal, vida al recuerdo de un hecho gravísimo que no debe quedar en el olvido.
Ojalá pudiera volcar las imágenes que me llenaron de emoción ayer…
La manifestación, dio nuevamente un ejemplo de civismo. No había pancarta de cabecera, hecho que me pareció clave a la hora de hacer ver que del primero al último todos todos valemos un potosí. Las caras de Juan Andrés multiplicadas, dieron una muestra de objetivos claros:
Todos somos Juan Andrés Benitez. Fue él pero podría ser cualquiera mañana. Y no, no lo podemos permitir.
Confluencias y sinergias, son un claro ejemplo de lo que ha dejado Juan Andrés, en su paso por Barcelona, una y otra sirvan de ejemplo como muestra de que juntos lo conseguiremos.
Texto: Gerardo Ariza
Fotografías: Pedro Mata
