Este pasado miércoles 21 de noviembre, los vecinos y las vecinas del barrio de Gracia volvían a reivindicar la conservación de la encina centenaria y las casetas de Encarnación. Cerca de 150 personas han traído la reclamación a las puertas de la audiencia pública que se celebraba este miércoles en la sede del distrito. En un pasacalle popular, han trasladado ramas y restos de los árboles que los operarios talaron el primer día de obras a las casas hasta plaza de la Vila de Gràcia.
Los vecinos empezaron a hacerse sentir cuando empezaron las obras y el día siguiente consiguieron que se pararan temporalmente.
La plataforma Salvemos l’Alsina y Les Casetes de la calle Encarnació asegura que las movilizaciones continuarán mientras no haya ningún acuerdo con la propiedad para impedir el derribo de las casetas y la tala del árbol más antiguo de Barcelona.
Fotos y texto: Joanna Chichelnitzky