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Barcelona, 18 de enero de 2014.- Centrémonos en las declaraciones que hicieron durante la jornada de ayer dos personajes: el alcalde Lacalle y la Vicepresidenta del Gobierno.

El alcalde de Burgos, tras el concurrido y polémico pleno matinal, decidió “paralizar las obras y
apostar por la convivencia de la ciudad”. Junto con su equipo de gobierno municipal, creyó que era “mucho más importante la convivencia de los vecinos que 50, 60 o 40 obras”. La explicación que dio para argumentar su decisión fue que “las obras no han sido el problema, si no la excusa de los disturbios. Han sido aprovechadas por algunos para otros fines”.

El otro momento de gloria lo protagonizó Soraya Sáenz de Santamaría durante la rueda de preguntas de los periodistas tras el consejo de Ministros: afirmó que las protestas no son legítimas, sobre todo ahora que ya se ven los signos de la recuperación económica.

El Partido Popular tiene una línea argumental, con un mensaje claro, del que no se aparta pase lo que pase: España va bien y hay que erradicar a los violentos aislados. Da igual lo que hagamos por rebatirles su mísero discurso: al fin y al cabo, ellos solamente son unos peleles, marionetas cuyos hilos son movidos por las manos de tipos como Emilio Botín, Amancio Ortega, Isidre Fainé, Miquel Roca, Cesar Alierta, Florentino Pérez…

Estos son los que, desde el cobijo que dan las grandes corporaciones empresariales, marcan los guiones del teatro en el que juegan sus peleles los políticos y los sicarios del sistema: los cuerpos policiales y judiciales, todos.12008186104_b114191130_z

Lo de Gamonal no ha sido por una obra, efectivamente. TODOS —población, políticos, policía, cuerpos judiciales y grandes empresarios— saben exactamente cuáles son las razones. Parece que aquello con lo que nos hemos desgañitado gritando por las calles por fin empieza a cumplirse: se ha acabado la paz social.

Por cierto, me permito una licencia. El momento poético de la jornada de #GamonalResite tuvo lugar en Barcelona, sin duda alguna. La guardia urbana de la comisaría de las Ramblas, probablemente, no piense como yo.

Fotografías: Manu, Jorge, Mar y Tono
Texto: Mónica Solanas