El pasado viernes 26 de octubre, convocado por el CDR de Nou Barris, decenas de personas llegaron hasta el antiguo edificio de Telefónica, vacío desde hace años, en la Calle Boada, con intención de liberarlo. Finalmente, debido a la presencia de seguridad privada de un edificio anexo y otros imprevistos no se pudo ocupar. Aún así, se quedaron y llevaron a cabo una acción para visibilizar que esta ciudad tiene espacios suficientes para las refugiadas que duermen en la calle y reclamar los equipamientos prometidos en el barrio de la Prosperidad.
Fotos, Joanna Chichelnitzky