Félix (65 años), vive desde hace 6 años en el interior de un vehículo junto a la Ronda Litoral de Barcelona. Seropositivo y ex cocainómano, sufre una discapacidad del 78% por la que percibe una pensión que no alcanza los 350 €.

Su vida nunca fue fácil, pues nació en el marginal campo de la Bota de Barcelona y pasó parte de su infancia en el Hospicio de Wad-Ras.

Culto, interesado por la geografía, historia y psicología, pasa sus horas entre libros y cómics que gente anónima le trae periódicamente.

La integridad y honestidad son el eje sobre el que gira su vida, y es por ese motivo que no acepta dinero sin perder la esperanza de  vivir algún día bajo su propio techo.

Texto y fotografías de Jordi Parra

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